miércoles, 27 de mayo de 2015

Colgadéz

Hola, soy  Doris y ...y...yo nunca he comido un pez.
Na joda, obviamente no soy Doris... lamentablemente.
Bien, dejando de lado a Doris, que en paz descanse (re que la mina no habia muerto), hoy me pasaron esas cosas en las cuales uno se  cuestiona si ser colgado estaba bueno o no. En realidad no creo que muchos se tomen el tiempo para cuestionarse si ser colgado esta bueno o no jajaja. En realidad no me imagino a nadie.
En fin, todo empezó cuando la nación del fuego atacó, solo el avatjasfdoihsdanf. Eso no.
Voy a la facultad de lunes a jueves, por ende ayer porque tenia una materia que cursar y esa era Introducción al medio físico, La materia es algo aburrida, para el nombre que tiene. Obviamente a mi no me entusiasma mucho ver como se clasifican las rocas, creo que lo único que debo saber es que las rocas nacen, crecen, se reproducen y mueren como todo ser vivo. jajaja es joda, también hay personas que mueren sin reproducirse. La clase la da un chabon de unos 50 años (en realidad no tan chabon) y ponéle que le cuesta un poco centrarse en el tema pero puedo decir por mi experiencia clasificando rocas que el pibe si sabe. Aunque en realidad siento que en vez de ser profesor de Ciencias de la tierra es mi maestro en la culta enseñanza de colgadéz*.
El día estaba tranqui, lamentablemente aquellas clases me dan mucho sueño pero había algo que no podía olvidar: ir al médico. El turno lo había sacado hace un mes más o menos, inclusive llamé a varios hospitales para saber cual me podía otorgar el turno más cerca. ¿Por qué tengo que ir al médico? Bien, el hecho de ser un chico trans (transgénero, transexual, transporte, transgénico)y estar en tratamiento hormonal significa que tengo que tener ser constantes con ciertos controles médicos y otras cosas que ahora no vienen al caso.
Me tome el tren hacia mi casa (departamento) porque es más barato y el día se prestaba para caminar, Estaba fresco y lloviznaba, y se sentía como si solamente cayeran las gotas en forma de puntitos que lanza un rociador antes de que el agua tirada al aire desaparezca. Llegué a casa, me hice algo rápido (como siempre) y luego de hacer digestión (estar echado en la cama) me cambie y salí.
Lamentablemente por culpa de mi digestion me retrase un poco, y tuve que correr un colectivo porque llegaba tarde. Me subí al colectivo. Dije - Hola, $3, 50, él dijo- hola- y luego me asentó con la cabeza, respondí- gracias ( y todavía no sé que es lo que le estoy agradeciendo, si es cobrarme el pasaje, o llevarme).
Es hermoso cuando estás viajando y llueve, pero lamentablemente el reloj no estaba a mí favor y estaba un tanto inquieto. Para despejarme un poco simplemente me puse a pensar cosas, como ser el momento incómodo cuando te despides de alguien y luego terminan yéndose para el mismo lado.
Un 26 se me cruzó por la mente, hoy era 26, martes 26. Mi celular donde  había anotado el horario y el día de la consulta con el médico decía- Hospital Español, 15:15, miércoles 27.
Reí, pero esa risa producto de la bronca y la indiferencia. Era mañana. El turno era mañana. Igual bajé del colectivo para caminar un poco, cagarme de frió, bailar, y ser feliz. Bueno, no tan así.
Hoy cursé matemática, aprobé el parcial pero raspando según el profe.
Ir al médico, nuevamente, era la misión que tenía destinada para el día de hoy.
Llegue de la facultad, volví a comer a las apuradas mientras lavaba mis medias mientras pensaba que yo sin medias no puedo andar. Terminé de comer, terminé de lavar mis medias, terminé de pensar y salí rumbo al doctor. Estaba más tranquilo porque estaba vez llegaba bien, y ahora tuve más tiempo de pensar. Me pregunté qué pasaría si entrevistara a un borracho (no a mis amigos, a los otros que están en la calle) y supuse tres cosas:o  me invita un trago, o me habla filosóficamente, o me da un guante. Quizás lo haga porque siento que son personas que tienen mucho para contar.
Llegué al hospital con tiempo de sobra. Fui a entregar la orden de consulta y fue allí donde mi mundo se derrumbo. Ni exagerado era el pibe jajaja.
Al parecer ni existía el doctor que yo le nombraba a la secretaria. Todo mal. La mina le dio vuelta al mundo para decirme que no existía tal doctor y por ende no tenia turno. JÁ. Creo que me equivoque de hospital.
Me fui, y esta vez el día estaba hermoso (como siempre), realmente hermoso pero yo tenía sueño. Dormí en el colectivo, un señor me aplasto, me compré facturas para sentirme mejor y justo cuando estaba escribiendo esto me acorde que tenía que sacar fotocopias y que la fotocopiadora cerraba a las 19hs.

Me dicen colgado pero no recuerdo por qué.

*colgadéz: no sé si sera nueva la palabra, o si ya existe y la escribí mal pero es la palabra perfecta para ésta ocasión.
Nota: interpretar las siguientes palabras de cantidades de la siguiente manera para posteriores textos:
medio: mucho
un poco: mucho
tranqui: volando

1 comentario:

  1. Eu! Como soy tan colgada como vos, recién me cree el blog e.e ¿Seguime?

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